Mié. Abr 24th, 2024
Mascarillas quemadas

El fin de las mascarillas

Hoy es veinte de Abril, un día para recordar. Hoy por fin, después de dos años de plandemia, dejan a la población ser un poco mas libre.

Si decimos “dejan” y no “nos dejan” por que, algunos hemos sido libres desde el principio.

Como ya sabemos el bozal, va a seguir estando vigente en algunos sitios, como por ejemplo, en hospitales.

La imposición de las mascarillas en todos los aspectos, ha traído muchas consecuencias, y va a seguir trayendo.

Los mas pequeños debían asistir al cole con el bozal puesto, y estar con el incluso en las clases de deporte, produciéndoles cansancio, fatiga y dificultad respiratoria entre otros síntomas.

Las mascarillas y los problemas de salud

Estos supuestos trapos salvadores son un lugar de sobrecrecimiento de bacterias, hongos… relacionados directamente con la aparición de dermatitis, hongos, aftas, gingivitis, amigdalitis, faringitis, etc.

La mascarilla, hace que disminuya el oxigeno y aumente el CO2, fomentando el asma y la bronquitis entre otras enfermedades respiratorias.

Estos tapabocas hacen que respiremos mas por la boca ya que por la nariz no inhalamos el suficiente oxigeno, provocando un déficit de atención ya que el sistema de refrigeración y ventilación del cerebro se produce a través del aire nasal.

Los centros respiratorios superiores actúan como ventilador del motor del coche, impidiendo que el aire entre muy frío, filtrándolo y evitando que se sobrecaliente el motor.

En nuestro cuerpo si el aire entra por la boca, no es adecuada la temperatura y se sobrecalienta el cerebro, teniendo que ponerse en pausa un rato para volver a trabajar de nuevo.

Al respirar por la boca, también obliga al sistema inmune de mucosas a estar siempre activado, ya que los “pelillos” de las fosas nasales son la primera barrera de protección, filtrando las partículas que inhalamos.

También actúa negativamente sobre el hipocampo, centro de la memoria, aprendizaje y atención sostenida, al respirar por la boca y no por la nariz no usamos el olfato, y este tiene un impacto directo en el hipocampo.

Estas son unas de muchas de las consecuencias del uso de las mascarillas de manera prolongada.

20 de abril, el fin de las mascarillas

También hoy, hay que recordar que se cumplen ciento treinta y tres años del nacimiento de uno de los últimos cesares de Europa.

Esperamos que la población, comience a liberarse del yugo de la dictadura sanitaria impuesta, luchando con el mismo valor de los que lucharon hace mas de ochenta años.

Un comentario en «El fin de las mascarillas»
  1. […] usar el bozal (el que lo usara) en vía pública y en ciertos sitios. Pero este Gobierno, ha dejado el uso de este método de asfixia, en hospitales, farmacias y transporte público. Algo incomprensible lo del transporte público y […]

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