La lista de la barbarie

La lista de la barbarie

Hace pocos días que se filtraron nuevos documentos relacionados con Jeffrey Epstein. Muchos os preguntareis quien es este este señor y porque le damos cabida en este artículo. Pues bien, comencemos por explicar quién es Jeffrey Epstein.

¿Quién es Jeffrey Epstein?

Jeffrey Edward Epstein fue un magnate financiero y delincuente sexual estadounidense.

En 2008 fue condenado por tentar a la prostitución a menores de edad. En 2019 se presentaron nuevos cargos en su contra, en los que se le acusó de haber liderado una red de tráfico de menores.

Sin embargo, el juicio por los nuevos cargos que se le habían presentado no se llevó a cabo debido al fallecimiento de Epstein el 10 de agosto de 2019.

Al parecer este engendro, edifico una red de tráfico de menores, los cuales eran suministrados cual objeto a personalidades de toda índole y aspecto.

Llego a tener en su poder un avión, el cual se apodo como “Lolita Express”, con dicho avión organizaba viajes a una isla privada, en la que se sucedían los encuentros aberrantes.

La lista de la barbarie: ¿Quiénes aparece en los documentos de Epstein?

En los documentos filtrados, aparecen:

-David Copperfield: Una víctima reveló que el mago le preguntó si sabía que “a las niñas les pagaban para encontrar a otras niñas”.

-Bill Clinton: Una víctima dijo que nunca conoció a Bill Clinton, pero que Epstein le dijo que eran amigos. “Una vez dijo que a Clinton le gustan jóvenes, refiriéndose a las niñas”, contó.

-Estilista Frederic Fekkai: Una víctima dijo que una vez escuchó a Epstein hablar por teléfono sobre Fekkai y decir: “¿Podemos encontrar unas chicas para él?”.

-Donald Trump: Una víctima recordó una visita en 2001 a uno de sus casinos en Atlantic City. Sin embargo, no está claro si alguna vez conoció al expresidente y dijo que nunca le dio un masaje.

-Jean Luc Brunel: Se suicidó mientras estaba en la cárcel esperando su juicio por cargos de tráfico sexual.

-Michael Jackson: Una víctima señaló que lo conoció en la casa de Epstein en Palm Beach, pero negó haberle dado un masaje al cantante.

-Alan Dershowitz: Según una declaración, el ex profesor de Harvard abusó sexualmente de una menor de edad, además de ser testigo ocular del abuso sexual de muchos otros menores por parte de Epstein y varios de sus cómplices.

-Juan Alessi y Alfredo Rodríguez.

-Bill Richardson: el ex gobernador de Nuevo México.

Además, aparecen otros nombres

También aparecieron nombres como el Príncipe Andrew y Thomas Pritzker, director ejecutivo de Hyatt Hotel Corp.

Un correo electrónico recién revelado de 2015 de Epstein, también sugiere que Stephen Hawking estuvo involucrado. El correo dice que Giuffre alegó que Hawking, mientras visitaba la isla, había participado en una “orgía de menores de edad”.

La lista de nombres es larguísima, aunque el hecho de aparecer en ella no es constitutivo de ningún delito, aparecen los nombres de muchos famosos como: Leonardo DiCaprio, Michael Jackson, Kevin Spacey, Cate Blanchett, Cameron Diaz, Bruce Willis, Naomi Campbell, Tom Hanks y hasta Oprah Winfrey.

Esta última llegó a cerrar sus redes sociales tras la filtración de los documentos de Epstein; este hecho de cerrar las redes sociales no quiere decir nada, pero a la sociedad le ha parecido bastante raro.

Ni que decir tiene que las elites, las personas adineradas, los famosos de todo tipo, tienen unas filias un poco raras, llegando al punto de estas aberraciones.

Las fuentes apuntan que Epstein se suicidó

Epstein, murió en la cárcel, en agosto de dos mil diecinueve, el motivo de su muerte, parece ser el suicidio, pero datos de los últimos días, que aún no se han corroborado, indican que la autopsia del cadáver de este engendro, desvelo, que fue golpeado y colgado, con el objetivo de aparentar un suicidio.

Es posible, como en toda conspiración, que fuera silenciado para que no repercutiera en ningún miembro de las elites.

Aun así, desde aquí, esperamos que los involucrados en estos delitos aberrantes sean juzgados lo antes posible y que el señor Epstein este retorciéndose de dolor en el caldero de Satán como se merece por esas aberraciones cometidas.